Artículo publicado en Blasting News (Sept, 2016)
Sigourney Weaver recibe el segundo Premio Donostia en el 64 Festival de San Sebastián. Después de Meryl Streep, Glenn Close y Julia Roberts, la protagonista de ‘Alien’ se convierte en la vigésima actriz en recibir tan prestigioso premio

La actriz neoyorquina Sigourney Weaver ha recibido en San Sebastián el Premio Donostia en reconocimiento a toda su trayectoria artística de manos del cineasta español Juan Antonio Bayona.
La gran noche de la actriz, celebrada este miércoles en el auditorio Kursaal de la ciudad donostiarra, arrancó con un vídeo que recordaba la primera visita de Sigourney al certamen en 1979 con motivo del estreno de ‘Alien: el octavo pasajero’ de Ridley Scott, filme que se estrenó por primera vez en el Teatro Victoria Eugenia de la capital donostiarra. Según la interprete norteamericana, tiene guardadas como un tesoro sus fotos de su paso por San Sebastián el cual visitó por primera vez junto a sus padres.
“Tiene un especial significado para mi volver a este festival, en una tierra que amo y que ha ocupado un lugar muy especial en mi corazón”, asegura la chica de Manhattan.
Durante la ceremonia para recoger el premio honorífico del Zinemaldia, Sigourney se mostró profundamente honrada y aprovechó el momento para reconocer a la «gente maravillosa» con la que ha trabajado a lo largo de casi cuatro décadas de profesión. “Este premio significa muchísimo para mi porque procede de los maravillosos cineastas españoles con los que yo he trabajado, de un país que toma muy en serio su cine y ha realizado tantas películas maravillosas”, apuntaba la actriz.
La actriz que ha dado vida a multitud de personajes memorables, entre los que destacan Ripley en ‘Alien’ o Dian Fossey en ‘Gorilas en la niebla’, ha dedicado parte de este premio que le otorga el Festival de San Sebastián a todos los directores con los que ha trabajado. “He aprendido muchísimo especialmente de Peter Weir -‘El club de los poetas muertos’ y ‘El show de Truman’- quien me ayudó a entender cómo rendirme al caos de una película porque yo procedía del teatro”, explicaba la intérprete.
No obstante, Weaver también quiso aprovechar la entrega de premio para mostrar su desencanto con el cine de las grandes producciones. “Cada vez están más preocupados por los beneficios económicos que por los artísticos”. Y señaló que en su caso nunca le han importado el tamaño del papel sino la belleza de su personaje.
Por último, la actriz dedicó unas palabras al papel de la mujer en el cine: “Nuestro paisaje ha cambiado. Las mujeres desempeñan un papel fundamental en el mundo y esto se ve reflejado en el cine. En mi caso, por ejemplo, me proponen papeles que antes solo hacían los hombres”.